Festival Shopping Guide

Keeping up with the rhythm of trends… and music. Nobody has been able to forget. Those pictures of Kate Moss enjoying Glastonbury music festival which flooded the Internet by the beginning of 2000’s decade are so based in our cultural imagery that settled the bases for a whole new way of dressing: the festival look that later developed its own collections signed by the best brands. Where there’s a festival there’s a special edition, and they always succeed because getting dressed to have a good time (specially during the summer) sounds always like a good idea. Three trends of the season fit the festival spirit and, if you follow their rhythm, you can never get lost.

The most important one is presented by Natasha Ramsay-Levi and Chloé, Jonathan Anderson for Loewe and Julien Dossena at Paco Rabanne and it consists in the traveler look. Full of boho spirit, you can master it if you think in adding to your wardrobe little treasure finds from all over the world. Picture this: a denim jacket, a tie-dye t-shirt, a pareo style skirt, a pair of sandals from Marrakech’s zoco and the kind of earringls and bangles (anklets are non-negotiable) that sounds like music. In the second place comes the crochet, this time with a refined upgrade but still romantic as proposed in Oscar de la Renta, Altuzarra and Michael Kors Collection. Last, but not least, it’s the easier and fresher option. Even we tend to think in a multicoloured palette when it comes to festivals, you should try the monotone neutral look, because it definitely works beyond the office. You’ll find inspiration in Givenchy, Chanel and Max Mara’s collections.

You can already hear the music, don’t you?

Al ritmo de las tendencias… y de la música. Nadie las ha olvidado. Las imágenes de Kate Moss en Glastonbury que corrieron como la pólvora por Internet durante los primeros 2000 forman parte hasta tal punto del imaginario colectivo que sentaron las bases del código de vestimenta para acudir a un festival y dieron pie a que las mejores marcas elaboren colecciones especiales asociadas a las citas musicales clave de cada verano. Donde hay un festival hay una edición especial que siempre funciona porque pocas cosas generan tanta emoción como vestirse para pasar un buen rato. Este año no solo una, sino tres de las tendencias de la temporada son perfectamente aplicables a este tipo de eventos, y al ponerlas en práctica no cabe margen de error.

La más importante viene de la mano de las propuestas de Natasha Ramsay-Levi en Chloé, Jonathan Anderson en Loewe y Julien Dossena en Paco Rabanne y es el look de la viajera. Cargada de espíritu boho, consiste en ir incorporando a tu armario esas piezas que parece que has ido descubriendo en distintos rincones del mundo. Piensa en una cazadora vaquera, una camiseta con print tie-dye, una falda tipo pareo, unas sandalias adquiridas en el zoco de Marrakech y esos pendientes y pulseras (la tobillera no es negociable) que vienen con su propia banda sonora. La segunda se construye a base de crochet, pero esta vez en clave ligeramente refinada como en las colecciones de Oscar de la Renta, Altuzarra y Michael Kors Collection, aunque no pierde un ápice de romanticismo. La tercera es la más sencilla de pasar por alto porque al pensar en un festival imaginamos automáticamente la más amplia gama de color. Pero construir un look en tonos neutros como el crema o el caqui es un acierto más allá de la oficina. Encontrarás la inspiración en las colecciones de Givenchy, Chanel y Max Mara.

Ya puedes escuchar la música, ¿verdad?

 

 

 

 

Next stop: the new 90s

Hey folks!
It’s really complicated to follow the path of trends without getting lost nowadays, but one of the advantages of their constant flow is enjoy that precise moment when styles from different decades coexist. Even mixing them might seem difficult, we all do it almost everyday, and it’s the only way our looks achieve a contemporary air instead of seem literally brought in from the past.
During our days in the Amalfi coast I had the chance to put this theory in practice with one of my favorite iconic pieces from the 90s: the floral slip dress. With an easy silhouette and the thinest of the straps, it has this romantic and rebel flair that Winona Ryder interpreted perfectly well in “Reality Bites”. Those years demanded a pair of military boots, but in our days it is better worn with sandals in a natural shade.
¿The best part? The colors of the dress definitely matched the hues of the landscape. I give you shopping ideas at the end of the post. Hope you like it!

Hola chicas!
Una de las ventajas del ritmo vertiginoso al que cambian las tendencias es aprovechar ese momento en el que estilos de distintas décadas conviven. Aunque combinarlos en principio puede parecer complicado todas lo hacemos casi a diario, y es la única manera de que los looks tengan un aire contemporáneo en lugar de parecer rescatados directamente del pasado.
En los días que pasamos en la costa Amalfitana puse esta teoría en práctica con uno de mis iconos preferidos de los 90: el slip dress con estampado de flores. De silueta recta y con tirantes finísimos, tiene ese aire entre romántico y rebelde que tan bien interpretó Winona Ryder en “Reality Bites”. Los 90 le pedían unas botas de cordones de inspiración militar pero en estos días el giro ganador se lo aportan unas sandalias en rafia natural.
¿La mejor parte? Que los tonos del vestido encajaban a la perfección con los del paisaje. Al final del post os dejo propuestas de vestidos. Espero que os guste!

Up!

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