Bingin Beach

¡¡Hola chic@s!! Qué de días sin escribir por aquí, de corazón que lo siento pero no tenía energía para llegar a tiempo con todo… demasiados viajes entrelazados, cambios de horario, fotos que enviar y Coachella entre medias que me dejó literalmente con las energías a cero :S. Lo importante es que ya estoy de vuelta por aquí y espero que estos parones en el blog pasen menos a menudo, antes conseguía hacerlo todo pero deben ser los años que voy sumando que cada vez cuesta un poquito más trasnochar para hacer post… jeje.

Me había quedado en mis aventurillas por Bali, tengo muchas fotos aún por enseñaros así que creo que durante estos días publicaré dos entradas diarias en el blog para ir cogiendo el ritmo y que no se quede el viaje demasiado desfasado, además que me apetece daros consejos por si decidís viajar hasta allí. Las fotos de hoy las hicimos en Bingin Beach, una de las playas con más fama de Bali y donde el equipo de Faithfull y yo decidimos alojarnos durante dos noches para explorar la zona. La playa es bonita pero no me impresionó, aunque suene un poco paleto creo que tenemos mejores playas en España :P, es larga, con grandes olas, muy rocosa y en ella te puedes encontrar a locales pescando y familias pasando el día.

Nos alojamos en un hotel a diez minutos de la playa, Sal Secret Spot, me encantó porque era pequeño, con pocas habitaciones, cada vez que viajo valoro más esto, odio los hoteles enormes en los que tardas una eternidad en llegar a la habitación y en los que parece que nunca encuentras un hueco en la piscina para darte un chapuzón, muy sencillo y bonito al mismo tiempo, y además contaba con un pequeño restaurante donde probé uno de los mejores arroces “Nasi Goreng” que me daban la vida por la mañana.

Vestido/Dress: Faithfull, HERE (more Lace and Spring Dresses)
Bikini: She Made Me, HERE & HERE (more Swimwear)

Zen Hideaway

Tercer día en Ubud, nos despertamos super pronto para salir rumbo hacia la casa que Faithfull había alquilado para nosotros para pasar un día haciendo fotos, comiendo y disfrutando del selvático paisaje. Cuando llegamos no nos esperábamos que la casa fuera tan espectacular, dos cabañas de madera de teca con decoración rústica, vistas al río, jardín, hamacas y un columpio de madera anclado sobre dos palmeras para columpiarte sobre el acantilado.

Sobre el columpio solo os puedo decir que no nos montamos así, sin más, estuvimos más o menos 1 hora de reloj diciendo sí o no, nos subíamos y nos bajábamos, daba muchísimo vertigo lanzarse… tenía la esperanza de que a Diego no le diera miedo para sentirme así más capaz de hacerlo, pero le pasaba exactamente lo mismo que a mí… le daba muchísima sensación. Al final una pareja encantadora, que estaban alojados en la casa de al lado, nos dijeron que parecía más de lo que era y que cuando te lanzabas no te daba miedo y que teníamos que intentarlo… se columpiaron varias veces para que les viéramos hacerlo y al final nos lanzamos, primero Diego y unos 20 minutos más tarde yo jaja. Solo os puedo decir que la encantadora pareja tenía razón, cuándo consigues despegarte del suelo no da miedo e incluso crea adicción, así que ya sabéis si vais por allí hacerlo, si yo pude vosotras también.

Llevo un conjunto de falda y top palabra de honor de rayas en tonos mostaza de Faithfull combinado con sandalias orgánicas de Nomadic State of Mind, muchas me habéis preguntado por ellas en Instagram y la verdad es que son lo más cómodo que he tenido en mi zapatero hasta la fecha y además son ideales. Las encontré por casualidad buscando cestos de paja por Internet, no encontré ningún cesto que me gustara, pero no sé como descubrí esta marca y es genial. Tienen tienda en España con algunos modelos y también en USA con la colección completa, pero en este caso tendréis que tener en cuenta los gastos de envío y posibles aduanas.

Espero que os gusten las fotos y que tengáis un día 10!


Total Look: Faithfull, HERE & HERE (more Dresses and Swimwear)
Sandalias/Sandals: Nomadic State of Mind, HERE (more Sandals)

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